De lo que no hay duda es que el doblete de Ferrari de esta semana ha sido incontestable, ambos coches se han mantenido en cabeza desde la Q3 sin dar opciones a nadie más, muy por encima del resto de las escuderias.

La carrera por abajo ha estado entrenida, la llegada de la lluvia siempre anima las cosas: la lucha Trulli vs. Kovalainnen ha sido muy bonita (el finladés lo está haciendo bastante bien). También está claro que si se califica con poca carga de combustible es muy dificil hacer algo importante en la carrera. El tapado sin duda el Kubika, que sin hacer mucho ruido va recolectando puntos colocandose ya solo a 2 puntos del liderato, y mostrandose como el más regular de la parrilla.

Entiendo que los Alonsistas, esa sub especie que nació a partir de la explosión de Alonso en la F1, (por que cuando el asturiano estaba en Minardi pasaban de él) estén triste, desilusionados y apesadumbrados... ni el piloto y mucho menos el coche están cumpliendo las expectativas. En esta carrera salía tercero en parrilla, superado por Trulli y Kubica en el mismo momento de apagarse los semáforos, más tarde Kovalainen y Webber se lo merendaron más tarde por estrategia. Al final, hasta Nelsinho ha podido pasar al asturiano, que se ha tenido que conformar con la 8ª posición.