Diario de un Skin, mucho más que una película o una novela

Para los que no la conzcais decir que Diario de un Skin es la adaptación cinematográfica del libro homónimo de Antonio Salas; y digo libro, ...

Para los que no la conzcais decir que Diario de un Skin es la adaptación cinematográfica del libro homónimo de Antonio Salas; y digo libro, que no novela, ya que Antonio Salas es un periodista de investigación que se infiltró en una red de Skin Heads de ultraderecha.

La película en sí no está mal pero para mí presenta un gran problema: es totalmente sensacionalista desde su propio título, no hubiese sido mejor llamarla Diario de un Bone Head. El problema es el de siempre, generalizar.

El movimiento Skin Head es originario de Gran Bretaña y surguio a medidos de los años 60. Hagamos un poquito de historia: a principios de los 60, la tribu urbana más numerosa de Gran Bretaña, pero a medidos de la decada la entrada de flower-power en la gran isla "robó" algunos adeptos a los mods, convirtiendose en hippies. Los mod como represaría a esta "huida" radicalizaron sus tendecias y se aferraron más al ska y a la música negra, además se actitud se tornó más agresiva, estos mods se hicieron llamar hard-mods.

Estéticamente los hard-mods se alejaban de "sus padres" (los mod) y de su ropa elegante y comenzaron a vestir ropa con la que se identifica a la clase obrera: botas de trabajo, tirantes... Además para posicionarse en contra de los hippies, en vez de dejar crecer su cabello, se lo cortaron (sin llegar a raparselo). Estos primeros hard-mods siguen evolucionando y reciben varios nombres noheads, baldheads, cropheads, spy kids, peanuts hasta que en 1969 se acuña el término Skin Heads.

Hasta aquí ¿alguién ha escuchado una sola palabra de política? ¿he dicho que los skin heads sean de derechas, izquierdas o del partido de Rosa Diez? Las respuestas son claras: no y no.

En Inglaterra el futbol es el deporte rey, por ello nace una nueva rama dentro de las tribus sociales: los hoolligan. Como los Skins los Hoolligan rinden culto al coraje y al compañerismo y se sienten orgullosos de pertenecer a la clase trabajadora. La política en este momento no tiene la menor importancia dentro de estas tribus sociales, aunque debemos decir que la mayor parte de este grupo votaba al Partido Laborista (de izquierdas).

Los skinheads como grupo no eran ni racistas ni antiracistas sino que esta postura dependía de cada uno. Además la actitud con respecto a las otras razas era contradictoria: mientras se mantenía una buena relación con los jamaicanos (negros) y se escuchaba su música, también se debe recordar los enfrentamientos que tenían con los inmigrantes, sobretodo pakistaníes. Esto se debe a que los jamaicanos se adaptaron perfectamente a las costumbres inglesas y los pakistaníes querian desmarcarse de la misma. Esto da lugar a dos tendencias dentro del movimiento: los Boneheads, que se distinguían por el orgullo a su país y el racismo; y los Skinheads, que prevalece la cultura del espíritu del 69, antiracismo y solidaridad.

continuará

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