¿Cómo hablar de una cinta que se pasa el 50% del tiempo hablando en un idioma que desconoces (francés)? Pues aunque no lo parezca es fácil, a continuación os explico por qué: la historia trata sobre una pareja que estará dos días en París, pero el caso es que ella es francesa, parisina además, mientras que él es norteamericano y al igual que yo tampoco sabe francés.

En ese momento, yo, como espectador logré conectar con él, escuchar y no saber que dicen, pero “sentir” lo que está bien, lo que me gusta y lo que no me gusta/le gusta tanto. Y quizás este punto, el no saber es lo que le da ese toque que la hace atractiva, pero que a la vez nos cansa e igual que a Jack, nos hace sentir fuera de lugar. Al final sobretodo los amigos de Marion central demasiada atención.

Uno de los puntos fuertes de la cinta son los diálogos, sobre todo entre la pareja: intelectuales pero a la vez sarcásticos y burlones. Terminando con un gran monólogo de la actriz, directora y guionista (sí, ella se guisa toda la película) capaz de resumir el amor desde el punto de vista de una mujer despechada (y no como Carrie en Sex & the City).

Lo que menos me ha gustado es el personaje vegetariano-ecologista-angelical de la hamburguesería. En una película tan real dicho personaje parece exagerado y sobretodo improbable.

De todas formas 2 Días en París es una buena comedia ácida, ágil y entretenida. Os gustará si os gusta el gran Woody Allen, aunque como siempre, las comparaciones son odiosas y de momento Julie Delpy es Julie Delpy y Woody Allen es un genio.