La cinta cuenta tres días en la vida de Ross, un joven abandonado por su novia y enganchado a la metanfetamina (un saludo a todos los que estudiéis farmacia). Esta sustancia es el nexo de unión entre los personajes de cinta: consumidores, camellos y “fabricantes”.

Spun no es divertida, aunque tiene momentos que si producen una sonrisa, tampoco es una cinta dura como Réquiem por un Sueño o Trainspotting, tampoco paranoica como A Scanner Darky… ¿entonces qué es? Pues no tengo respuesta a esa pregunta. Simplemente se nos muestra a los consumidores, fabricantes y camellos que usan la sustancia para evadirse de sus vidas anárquicas y mediocres, vemos como a través del speed nuestros personajes llegan a diversos estados emocionales, pero sin juzgarlos ni intentos de aleccionar al espectador.

Estéticamente Spun es una película diferente: imágenes supra-aceleradas, cortes, tambaleos, temblores, dibujos, alucinaciones… ¿Quién tiene el mono: los actores o el director? (Otra pregunta sin respuesta) Cuando menos podríamos definirla como curiosa.

Los actores están correctos y es llamativo que en una cinta tan alejada de los circuitos comerciales encontremos a actores como: Mickey Rourke, Mena Suvari o Brittany Murhy. Quizás el único que no cumple es el protagonista: Ross, que simula su mono mordiendo constantemente las uñas y rascándose la nariz… el resto de los personas son mucho más convincentes en sus gestos y miradas (la actuación de Mena Suvari en la escena del teléfono es increíble).

De lo que no hay duda es que la banda sonora de esta cinta es realmente buena, el encargado de realizarla fue el líder de Smashing Punkies: Billy Corgan, que además interpreta alguno de los temas de la misma. Me han gustado mucho la versión de The Number of the Beast, todo un clásico del heavy, que fue hecha por Djali Zwan. Con mucha diferencia la BSO es lo mejor de la cinta.

Recordad una cosa antes de verla: por mucho que las dos hablen de drogas, por buenas que sean sus bandas sonoras, Spun no es Trainspotting.

Pd.: si la veis tened ojo con los cameos: Deborah Harris (cantante de Blondie), Rob Halford (cantante de Judas Priest) e incluso podéis ver en acción a Billy Corgan.