Half Nelson nos narra la historia de un profesor, Dan, que imparte clases de Historia en un instituto suburbial de Brooklyn, es un profesor joven, atento y preocupado por sus alumnos, además es el entrenador del equipo femenino de baloncesto del instituto; todo un ejemplo para esos niños de 13 años. Pero tras esta primera impresión Dan es un hombre que está solo y recurre a las drogas para evadirse. Un día, Dan tiene que enfrentarse a su realidad gracias a una alumna y en ese momento comienza la trama. Una trama que provoca sensaciones agridulces, que lleva al espectador a recorrer los estados de animo de los protagonistas, sobre todo de Dan, contemplando su felicidad, sus ilusiones pero también sus malos momentos, sus caídas y sus contradicciones.

El director, Ryan Fleck, consigue una cosa muy difícil: cada persona que vea esta cinta tendrá sin duda una visión diferente ya que recurre a nuestras propias creencias para decidir lo que es malo o bueno… Quizás en algún momento echamos de menos un ápice más de dramatismo, de dolor, pero de lo que no hay duda es de que se crea alrededor de la cinta un aire dramático que lo inunda todo.

Las actuaciones son más que correctas: Dan está interpretado por Ryan Gosling y por este papel fue nominado al Oscar. Pero no está solo, la joven estudiante es Shareeka Epps que debutaba en el mundo del cine y lo hacia con una actuación seria y directa. No son un profesor y una estudiante, son dos personas que se encuentran en la vida y que durante un tiempo la recorren por el mismo camino.

Sí, es una cinta de esas donde los alumnos viven gracias y al maestro y el maestro gracias a los alumnos, pero no es como todas, no es Mentes Peligrosas, para nada, es una visión diferente, más dura y cruel de la vida, porque sin duda, no todas las historias son bellas ni tienen final feliz. Sin duda Half Nelson, con sus pros y sus contras, os gustará si os gusta el cine de verdad.