Persiguiendo a Amy (Chasing Amy)
18:27:00
Si buscáis algo de Persiguiendo a Amy en Internet veréis que todos hablan de su director: Kevin Smith; estamos ante una película de un ser al que podríamos considerar guru del cine de comics (o sobre comics) ya que además de director de cine es escritor de comics (y actor). Para financiar su primera película Smith tuvo que vender su colección personal de comics (aunque la recuperó gracias a la buena acogida de la misma) pero la inversión fue buena ya que ganó el premio más importante de Sundance (afamado festival de cine independiente). En Sundance fue fichado por Miramax, quien distribuyó su primer film y con el que rodó La Bruja de Blair. Más tarde vino Dogma y en el medio podemos encontrar la cinta de la que continuación, y una vez puestos en antecedentes, hablaremos.
Persiguiendo a Amy es sin duda una cinta que no deja indiferente a nadie, comentan que es un gran título, otros dicen que es un aburrimiento, unos que una película de cabecera, otros… Para mí Persiguiendo a Amy es como las opiniones que se expresan de la cinta en Internet: tiene algo de todo. Sus diálogos gamberros e irreverentes haran las delicias de ese joven que en vez de sangre tiene un torrente de hormonas y la historia, la de verdad, la que está detrás del caca-culo-pedo-pis les gustará a los que se sientan en el sofá a ver dramas amorosos. Quizás porque se apoya en la realidad llega a convencer.
En ocasiones, por ejemplo a la salida del partido de hockey, los diálogos no son irreverentes o soeces, se transforman en ácidos, pesados y dolorosos. Sin duda, esa parte es la parte que más me ha gustado, los momentos en los que surgen los conflictos y los personajes razonan para llegar a un acuerdo que se antoja imposible.
En el terreno interpretativo encontramos a Ben Affleck llevando el papel principal… la verdad es que salvo en un par de escenas, Affleck pasa sin pena ni gloria, parece que actuar le diese lo mismo. Pero no nos quedemos simplemente con este agrio sabor, en la cinta también encontramos a Jason Lee que se marca un gran papel como amigo celoso y cizañoso del protagonista y desaprovechado personaje en algunos momentos de la cinta.
No es una gran cinta, simplemente una comedia por y para frikis, pero sí, tiene sus virtudes y una buena historia de fondo.
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