El Curioso Caso de Benjamín Button es una adaptación de la historia de los años 20 del siglo pasado escrita por F. Scott Fitzgerald y que trata de un hombre que nace con ochenta años y va rejuveneciendo con el tiempo. El Curioso Caso de Benjamín Button también supone el reencuentro entre David Fincher y Brad Pitt tras grandes películas como Seven y El Club de la Lucha.


Las actuaciones son realmente buenas. La caracterización de Brad Pitt es brillante y su actuación, tras mucho tiempo, es realmente buena. Por momentos me ha recordado al Pitt de ¿Conoces a Joe Black? Un actor sereno, comedido… un gran actor. Su compañera de reparto es la fabulosa Cate Blanchett, si buscará un calificativo para definirla, lo más probables que es utilizase elegante. Blanchett irradia una magia especial y en sus momentos de treintañera está realmente bella.


La historia de amor entre Benjamín y Daisy es como una vieja historia épica en la que los personajes se cruzan una y otra vez, pero incapaces de cambiar su destino se separan también una y otra vez. Comedia, tragedia, amor y drama se dan la mano durante todo el metraje.

David Fincher da una lección desde la dirección. Crea un mundo onírico en el que introduce elementos reales (la I Guerra Mundial, la II Guerra Mundial, los Beatles, el huracán Katrina…) que nos sirven como espectadores para asumir el paso del tiempo en la vida de los personajes. Excelentemente contada, con tempo y sin prisa, consigue no hacerse pesada (y eso que casi son tres horas de cinta). Fincher, tras el tropezón de su primera cinta Alien 3, ha conseguido encauzar de una brillante manera su carrera, convirtiendose en director de culto para gran parte de los espectores.

Un melancólico cuento que no habla de la vida y lo efímera que es. Una cinta que nos muestra que hay vidas más rápidas, más cortas o que incluso se viven al revés, pero que en el fondo todas tienen un principio y un fin. Un himno a la vida y a la muerte, que no será la mejor película de la historia, quizás tampoco de la década o incluso del año, pero que sin duda es una cinta especial no por como lo cuenta, si no por lo que cuenta.