Si me ha quedado clara una cosa tras ver El Imaginario del Doctor Parnassus es que esta película no dejará indiferente a nadie, sin ir más lejos la pequeña Alury decidió girarse y dormir a media película (con una exactitud sorprendente) por otro lado, o mejor dicho, al otro lado de la pared Jordi considera que esta película es realmente interesante… como veis hay opiniones para todos los gustos y ahora me toca escribir la mía.

Es cierto que El Imaginario del Doctor Parnassus nos arrolla visualmente (¿qué hubiese sido de Avatar si El Imaginario del Doctor Parnassus se hubiese rodado en 3D? ¿Cuántas vidas hubiese necesitado James Cameron para rodar esta cinta?) dejando a un lado la historia que nos cuenta… vale, acepto el error de Terry Gilliam pero es indudable que ese estilo tan deslavazado favorece ese toque tan loco que tiene la cinta, la manera de contarlo es una parte más de la cinta que la convierte en eso: una cinta totalmente diferente a lo que estamos acostumbrados a ver.

Pero pasemos al mejor punto de esta cinta: el reparto. Es cierto que El Imaginario del Doctor Parnassus cuenta con ese halo morboso de ver a Heart Ledger por última vez en la gran pantalla; de hecho, Ledger falleció durante el rodaje de la misma de ahí los diversos cambios de “forma” y las apariciones de Johnny Deep, Jude Law y Collin Farrell (como diría una que yo me sé “ay omá, que ricos!”). Sus actuaciones son a cada cual mejor (siendo la peor la del difunto) generando además estas trasformaciones un juego genial en la cinta y en la pupila del espectador.

Pero sería injusto quedarnos en el ramillete de Tony’s ya que como Sr. Nick nos encontramos al diablo de verdad: Tom Waits… ¡acaso el diablo podía tener otra forma! Waits está realmente bien, se nota que ha disfrutado con el personaje que le ha tocado (“oh Parni, Parni, Parni…”) y es que Waits consigue esa cosa tan rara y tan especial de que los malos nos caigan mejor que los buenos. Ella es Lily Cole a la que el personaje le va como un guante gracias a ese físico tan espectacular como raro, quizás su piel blanquecina, quizás esos ojos tan grandes, quizás… es magnética a la par que extraña y probablemente sea el personaje que más evoluciona a lo largo del metraje.

Después de escribir todo esto no cabe más que decir que El Imaginario del Doctor Parnassus me ha resultado atractiva, interesante y muy recomendable (aunque soy consciente que más de uno se acordará de mi progenitora al ver la cinta) por todo ello a El Imaginario del Doctor Parnassus le otorgo: