Tras dos años es el momento de embalar algunos pares de zapatillas, una docena de libros, 20 camisetas de las que solo uso 6, un polo que nunca uso y 5 bufandas incomprendidas, innumerables recuerdos y millones de experiencias.

Es el momento de decir adiós a la Torre de la Concepción con sus puntuales 8, sus cuartos, sus medias y sus menos cuartos. El momento de decir adiós a los taxistas que te miran con mala cara con la faria colgando cada vez que paras a descargar. El momento de decir adiós a las marchas militares de Semana Santa y a los himnos de España al entrar los Cristos.


Dos años de experiencias: buenas, malas, regulares e incluso muy buenas. Dos años de amistades truncadas unas afianzadas otras, dos años de anhelos, esperanzas y trabajo. Parece que llegamos ayer pero no, nos vamos hoy ¿a un lugar mejor? No lo sé, diferente al 100% pero es el momento de seguir creciendo, buscar nuevos caminos, buscar nuevas metas, buscar un nuevo hogar...