Black Mirror, 2ª temporada

¿Para qué cambiar si las cosas funcionan? Esa es la premisa de los creadores de Black Mirror quienes en la primera temporada ponían en entr...

¿Para qué cambiar si las cosas funcionan? Esa es la premisa de los creadores de Black Mirror quienes en la primera temporada ponían en entredicho el uso excesivo de las nuevas tecnologías y en esta segunda siguen ahondando en el mismo.


De nuevo nos encontramos ante una trilogía de capítulos independientes entre si. Para hablar de los mismos he decidido utilizar el mismo orden en el que yo los visioné.

Be Right Back (Ahora Mismo Vuelvo)

En este episodio presentación los creadores de Black Mirror han decidido unir dos cosas: la simulación (y su consabida inteligencia artificial) y la adicción a las redes sociales. Be Right Back nos narra la historia de una joven pareja que ve truncado su futuro cuando Ash (él) fallece en accidente de tráfico, en ese momento, para afrontar el duelo Martha decide participar en un programa de simulación de personalidad a través de los datos obtenidos en las redes sociales y en nuestras conversaciones a través del correo electrónico. Pero ¿dónde está el límite de la simulación? ¿en un correo? ¿en una llamada? ¿en un androide que simule al ser perdido?

"¿En un androide que simule al ser perdido?" Exacto, simular no es ser, un androide por muy parecido no es un ser y mucho menos un ser amado y querido; ahí la clave de la primera crítica de la nueva temporada de Black Mirror: por mucho que queramos recuperar a alguien que se ha ido será imposible, por muchas posibilidades de encontrarlo de nuevo aunque sea a través de los que creemos "él", jamás volverá.

Sinceramente, siento una píldora de mal-rollo como siempre Black Mirror ha levantado el píe en este primer capítulo de esta segunda temporada, sí Be Right Back es incómodo pero quizás tan íntimo que nos aleja de la historia... le faltan vísceras a lo que debemos añadirle la luz: demasiado blanco, demasiado frío... gran idea pero muy lejana. 

The Waldo Moment (El Momento Waldo)

Lo hablaba con Enci, quizás sea el episodio más flojo de la temporada y es que El Momento Waldo es suave.

Waldo es una animación de un late-night que basa su humor de oso azul en el típico caca-culo-pedo-pis hasta que un día el director del programa propone la idea de presentar a Waldo como candidato a los comicios de una región inglesa. Pero el problema que presenta The Waldo Moment no es ese si no como llevado a por la decepción en la política y el populismo Waldo logra escalar en la pirámide política.

Quizás la idea no esté mal pero el problema es que Waldo es real: ¡Beppe Grillo se presentó a las elecciones italianas consiguiendo buenos resultados en las elecciones municipales! Grillo no es un oso azul pero es como meter el dedo en el ojo del político profesional. Que sí, que en los momentos finales Brooker intenta ser más apocalíptico con la presencia de "la agencia" intentado dominar el mundo y en los créditos finales ese mundo dominado por un oso azul que lanza mensajes hasta que el ciudadano se los crea pero no, debemos ser críticos The Waldo Moment es el peor episodio ya no de la temporada si no de la serie. Es cierto, que al ser el más frívolo puede también verse con el menos dañino y el más divertido de los seis episodios con los que cuenta Black Mirror hasta el momento.

Por cierto, me ha encantado Jackson Flemming dando vida al director del programa de Waldo.

White Bear (Oso Blanco)

Y puedo decir que he tenido la suerte de terminar la temporada con White Bear posiblemente el mejor episodio de Black Mirror en conjunto y sin lugar a ninguna duda el mejor episodio de la temporada.

Te despiertas como si un camión te hubiese arrollado, dolor de cabeza, cuello... ¿resaca? No cuando ves un bote de pastillas en el suelo... pero ¿dónde estás? No recuerdas nada de la noche anterior y todo es confuso, parece que aquella foto te suena pero ¿quién es ella? No lo sabes. Es cuando, como un animal, decides salir de tu madriguera y explorar. Calles vacía pero en las ventanas extraños no paran de hacerte fotos y grabarte con su móvil... ¿¡Qué coño sucede!? ¿Es un mal sueño? No, lo compruebas cuando un hombre con un pasa montañas decide dispararte con su escopeta de caza...

El párrafo anterior es la puesta en marcha de White Bear, el mejor y más incómodo episodio de Black Mirror hasta la fecha. Es increíble como desde principio a fin te atrapa y aprieta tus vísceras hasta que sientas asco de la propia historia, todo ello hasta el final que como espectador, nunca mejor dicho, te deja cabeza abajo pensando que es verdad o que es mentira... es una bofetada oscura contra nuestra conciencia social. Increíble, por actuaciones, por guión pero sobre todo por la asfixiante atmosfera que nos presenta. 

Para mí, Black Mirror ha terminado por la puerta grande!

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