Sé que hay gente que puede tachar de demagógico este post y es que muy probablemente lo sea pero es que considero que es necesario dejar claras ciertas cosas.

El candidato a la presidencia del gobierno español y actual líder de la ¿oposición? Mariano Rajoy ha dicho que debe respetarse la libertad de elección sobre ir o no a los toros y probablemente tenga razón por que lo que está claro es que prohibición tras prohibición los países no avanzan, todo lo contrario.

No defiendo desde aquí la ¿fiesta? de los toros, todo lo contrario, me parece un acto salvaje que tristemente representa a este país de corrupción, paella y sol… sí, por que la corrupción ya es tan española y habitual como los toros.

Está claro que esta polémica no es más que una cortina de humo para apartar nuestras miradas de frentes mucho más importantes; se le está dando demasiada trascendencia a un acto aprobado mucho antes en otras comunidades (como en Canarias) porque se ha cargado al mismo como un acto de separatismo catalán y es que en el fondo lo que asusta a esos políticos conservadores es la diferencia porque para ellos lo diferente es malo.

Pero nos estamos desviando; para Rajoy, taurino por lo que se ve, debe respetarse una libertad de elección que otrora pisa y vulnera… ¿Cuándo? Cuando este personaje y el partido al que representa carga contra la ley del aborto ¿o es que obligan a abortar a las mujeres? Por está claro que esta ley no obliga a ninguna mujer a interrumpir su embarazo tan solo le ofrece una libertad de elección que usted y su grupo pisotean (pero a la que recurren cuando les conviene como está quedando claro).

Señor Rajoy siempre debemos utilizar la ley de la misma manera sea para ejercer el derecho de asistir a una fiesta aberrante como son los toros o sea para poner fin a un embarazo no deseado.