¿Qué voto? (Diferentes manera de qué y cómo votar)
17:00:00
Sin ningún tipo de duda, el pueblo, ese que elige a los líderes que después hacen lo que les da la gana, está harto, harto de tanto robo, vejación, desidia y sobre todo mamoneo.
Es el momento del cambio, no hay duda muchos hablan del voto de castigo, del voto en blanco, del nulo e incluso de la abstención; esta será una de las pocas veces que haga un post útil y hoy intentaré explicar las diferencias entre ambos:
La primera opción es el cambio de partido. Señores, esto no es como ser del Madrid o del Barça; aquí se puede cambiar, podemos decirle a los partidos que siempre hemos votado que se están equivocando, que no han hecho las cosas bien… evidentemente no es muy lógico cambiar de PP al PSOE o viceversa, lo lógico sería movernos a partidos de nuestro espectro políticos (una duda ¿A dónde se moverían los del PP? ¿a la Falange? ¿a UPyD?).
La izquierda lo tiene más fácil del PSOE puede pasar al PP o a UPyD (sí, he dicho al PP actualmente las diferencias son escasas, señores del PSOE asúmanlo). O incluso, los de izquierdas podrían pasar a IU. Esto ayudaría además a dejar a un lado el bipartidismo que PSOE y PP nos están obligando a vivir; por cierto me niego a terminar este párrafo sin decir una gran verdad: PSOE y PP son el mismo perro pero con diferente collar.
Otra opción de la que se habla mucho es de la del voto en blanco. Esto viene siendo que nadie de los que se presenta me representa a mí. ¿Cuál es entonces el problema del voto en blanco? Que computa.
Con el voto en blanco queremos decir que los partidos no nos representan pero que el sistema está bien y lo que es peor: el voto en blanco favorece a los grandes partidos (de nuevo volvemos al bipartidismo PP-PSOE). Debido a nuestro (no) democrático sistema electoral un partido solo obtendrá representación si consigue el 5% de los sufragios ¿esto qué quiere decir? Que al computar el voto, aunque no se vote por nadie, los partidos minoritarios tendrán más difícil alcanzar ese 5%.
Por lo tanto, votar en blanco sería una queja pero una queja de la cual los poderosos saldrían beneficiados (vamos, dicho con otras palabras: el voto en blanco es un error).
Pasamos ahora a otro voto muy interesante: el voto nulo. El voto nulo no es válido ni computa, el problema será que los medios de comunicación comenzaran con los comentarios absurdos de “¿es nulo intencionado o tan solo es un error?” pero alguien se cree esta tontería, si voto nulo no es porque sea imbécil si no porque muestro mi total desacuerdo con esos cretinos y este sistema que nos han impuesto… el nulo por lo tanto sí es una opción.
Pero últimamente se ha escuchado mucho una palabra” abstención”; abstención es no ir a votar… los motivos son muchos: castigar al sistema o a un partido (no cambio mi voto pero tampoco voto otra cosa) o pereza (lo cual reafirmaría eso de que los jóvenes pasamos de la política). Tengo un amigo anarquista que diría que esta es la mejor solución pero el problema es que es lo mismo que hace la imbécil de la compañera de piso de mi novia… y mi amigo no es imbécil… la abstención es una opción pero no la que más beneficiaría a los jóvenes.
Y la última opción sería la del voto a partidos minoritarios (esos que encontramos en cada pueblo, en cada ciudad). Es una opción interesante pero en este país hay un problema la archiconocida Ley D’Hont, una ley que hace que no todos los votos valgan lo mismo (amigo lector ¿a que esto ya no parece un democracia?), una ley que favorece al binomio centralista y que hace que por ejemplo a IU le cueste más un escaño que al PP o al PSOE…
No sé compañeros, no tengo la respuesta final pero si tengo una parcial: a ellos, a los centralistas, a los mentirosos, a los ladrones, a los que manejan el cotarro y se ríen de nosotros ¡NO LES VOTES!
9 seres inteligentes han dicho y tú, ¿a qué esperas?