La Vida Sublime

No seré yo quien diga que La Vida Sublime carece de sentido pero sí puede decir que yo no se lo he encontrado; en ciertos momentos he ente...


No seré yo quien diga que La Vida Sublime carece de sentido pero sí puede decir que yo no se lo he encontrado; en ciertos momentos he entendido que se trata de una reflexión filosófica sobre la vida, en otros de un discurso político (o en contra de la política), en otras un documental sobre Sevilla… pero lo que no es en ningún momento es una cinta al uso ¿A qué uso? Al normal.

Es diré que me pasé la primera mitad de la cinta con mirada ojoplática pero no porque lo que viese me causase una sensación increíble, todo lo contrario: porque no había por donde coger la película… parecía una serie de planos inconexos (de hecho lo son) que intentan reflejar algo que no sé demasiado bien que es… raro, muy raro. Llega un momento en el que empiezas a descubrir (más o menos) de que va el rollo y… sigue siendo igual de aburrido e incluso insoportable.

Llega un momento en el que te planteas si La Vida Sublime es una de esas cintas para gafapastas que ven más allá pero no coño, no, de aquí no se salva ni la fotografía, ni la banda sonora y mucho menos las actuaciones… es que no hay por donde cogerla, de verdad; incluso me da pena sacar a pasear hoy a los gatitos, ellos no se merecen esta La Vida Sublime:

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