El Parón Navideño de 2011 (I)

Como viene siendo habitual en estas fechas toca repaso a lo que se puede considerar el primer tramo de la temporada baloncestística, por lo ...

Como viene siendo habitual en estas fechas toca repaso a lo que se puede considerar el primer tramo de la temporada baloncestística, por lo tanto, y ya que Javi se muere por conocer mis críticas, llega el repaso navideño de la temporada.

Habitualmente empezamos por los más chicos y poco a poco vamos escalando categorías. Este año será diferente y es que hace bien poco hablábamos de lo sucedido en el seno del Unión Baloncesto Laguna.

Está claro que no vamos a seguir dándole vueltas al mismo tema una y otra vez. Lo sucedido en el sub22 (o por lo menos mi versión) ha quedado claramente expuesta toda la pasada semana, por lo tanto ahí queda. Sí, ha sido una decepción, no por el equipo evidentemente, pero hemos de seguir avanzando.

Tras el sub22 y bajando categorías (en edad, nunca en trabajo o importancia) llega el turno del preinfantil masculino del C.B. Canarias del que formo parte como ayudante.

Explicar primero que en Canarias existe una categoría que en Galicia no se disputa (o por lo menos cuando yo entrenaba allí no existía) es la categoría preinfantil, lo que viene siendo un eufemismo de “infantil de primer año”: una liga integrada tan solo por equipos infantiles de primer año.

Cuando Javi se puso en contacto conmigo en agosto me avisó que sería un año largo y duro; largo porque sufriríamos mucho y ganaríamos poco, y duro porque además de ganar poco tendríamos que trabajar mucho para hacerlo. Y no mintió: aquí no hay días libres, días de fiestas o cosas así (de hecho me siento culpable por haberme cogido esta semanita navideña), se trabaja día sí, día también y se trabaja de manera integral ya que además de los resultados se busca una formación total del jugador y de la persona.

Que sí, que esto no es un cole, ni una actividad extraescolar pero aquí, en el Preinfantil del Canarias, se le inculcan al jugador una serie de “valores” como pocas veces se he visto: las ausencias a los entrenamientos se pagan con la salida del jugador de la convocatoria (y puedo decir que da igual que sea el mejor o el menos bueno del equipo), una asignatura suspensa se penaliza con una semana sin entrar en la convocatoria, dos con las dos pertinentes semanas, tres… y así hasta que os imaginéis. Retrasos, fallos en los tiros libres, concesiones de 2+1… aquí todo es sancionable pero sanciones (menos las de exclusión de la convocatoria ya explicadas) con más trabajo y de mayor calidad.

Pero además de esta disciplina deportiva y extradeportiva en el equipo trabajamos muchas horas. Se trabaja en la formación del jugador de baloncesto total: todos juegan de todo, todos hacen de todo y todos juegan abiertos. Y es que la premisa de la que parte la coordinación deportiva es la de formar jugadores para el primer equipo, por lo tanto todos, altos y bajos, han de saber botar, penetrar, hacer cambios de mano… y es que en el fondo todos son escoltas.


Mañana la segunda parte

Aquí os puede interesar

0 seres inteligentes han dicho y tú, ¿a qué esperas?