Boardwalk Empire, 3ª temporada

Bienvenidos de nuevo a los "secos" años 20, bienvenidos a una sociedad separada por colores donde el que más dispara es quién cons...

Bienvenidos de nuevo a los "secos" años 20, bienvenidos a una sociedad separada por colores donde el que más dispara es quién consigue el poder. Bienvenidos a la tercera entrega de Boardwalk Empire.

Sí, ha sido una temporada muy irregular, con capítulos realmente buenos y otros totalmente prescindibles. Hemos asistido a un temporada donde las pistolas y escopetas han dejado lugar a las alianzas y demás estratagemas para perpetuarse en el poder... sí, también ha sido la temporada más dificil de seguir: demasiados nombres, colores, intereses y procedencias.

Como la cabecera de la serie esta tercera temporada comienza en la playa donde conocemos a Gyp Rosetti: gángster pero sobre todo sociópata quien se convierte en uno de los principales personajes de esta tercera temporada. Rosetti, como la serie, se pasa media temporada caminando sin rumbo aparente y dando rienda a su incontrolable violencia. Por que sí, por mucho que me guste Nucky y su imperio esta temporada ha sido totalmente ilógica: personajes que siempre habían aportado a la trama principal y a sus propias tramas son sacrificados sin conocer demasiado bien el fin de este sacrificio, por un momento, como espectador se te plantea la duda de si todo ello llevará a una lucha directa entre Nucky y Rosetti pero en ese momento llegan los dos últimos capítulos de la temporada y todo cambia...

Nucky ya no es ese personaje de fiestas, alcohol y mujeres, ya no puede vestir corbata, le toca ensuciarse y reflexionar sobre su vida, familia y codicia pero ya es tarde es el momento de luchar pero no para ganar, si no para no perder. Pactar con el diablo (o la policía , volver a contar con aquellos a los que le dio la espalda y luchar, empuñar un arma y no morir mientras queden balas, así es le final de Nucky Thompson, el antiguo tesorero de la ciudad, en ahora benefactor de la misma.

Sí, por que Nucky, contra su voluntad se ha convertido en benefactor de la ciudad por obra y gracia de su amada esposa Margaret, quien en esta temporada comparte techo pero no historias (ni amor) con su marido. Margaret vuela sola (aunque siempre al cobijo de la gran ala de su marido) hasta que al final su castillo se derrumba para terminar... se podría decir que al sus comienzos, a los años anteriores a ser la señora Thompson.

Pero lo más impactante (y no son pocas cosas en el tramo final de la serie) es la escena final que genera una gran incertidumbre: Nucky quiere convertirse en un hombre desconocido, se aleja de su hotel, de la fama y de su malecón para perderse entre la multitud que disfruta de la noche de verano ¿terminará el imperio de Nucky? ¿Es el momento de Capone? O simplemente será un colosal final para una serie siempre irregular.

Me gustaría hacer también una mención al gran Richard Harrow, un personaje que llegó a la serie sin hacer demasiado ruido y probablemente sin encajar y que poco a poco va ganando enteros. Un hombre que brilla como diamante en medio del carbón (¡que cursi!), un hombre integro en un mundo de alianzas y pactos oscuros. Un hombre torturado que lucha contra su pasado de herido de guerra y su presente como asesino a sueldo y solo intenta alcanzar un futuro como el de un hombre normal con una vida normal.

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