Tras salir del CheckPoint Charlie tomamos Friedrichstraße para acercarnos a Gendarmenmarkt. Gendarmenmarkt es según miles de guías de viaje la plaza más bella de Europa, en ella podremos encontrar la Deutscher Dom (la catedral de Alemania), la Französischer Dom (la catedral francesa) y el Konzerthaus, un palacio de conciertos. Hombre, pues personalmente yo considero algunas plazas más hermosas que esta, quizás no tan monumental pero con pequeños detalles que las hacen especiales.


La siguiente parada en nuestro itinerario sería el Memorial del Holocausto Judío, se trata de un monumento erigido en 2005 (el sexagésimo aniversario de la caída del nazismo). Cuando llegas a la esquina del monumento (parece un parque de bloques de hormigón) no impresiona demasiado, pero cuando caminas por uno de sus laterales el desnivel que existe entre las filas que forman los 2711 cubos tu concepto sobre el memorial cambia, se convierte en un bosque de bloques de hormigón gris que van desde los pocos centímetros hasta los 3 metros. Mucho más si prestas atención a sus números: tiene una extensión de 19000 metros cuadrados, vamos, como dos campos de fútbol. Entre los bloques más altos simplemente ves pequeños senderos que cuanto más avanzan más estrechos parecen y escuchas algo muy especial: el silencio; un silencio hueco en el medio de la gran urbe.



Tras salir de este bosque de hormigón llegamos a la puerta de Brandenburgo. Entre el Reichstag y la Puerta existe una parada de autobús, donde decidimos tomar el bus número 100. Para los que estéis interesados en conocer Berlín tened en cuenta que si os hacéis con una Berlín-Welcome-Card tendréis derecho al uso de U-Bahn (el metro), S-Bahn (un tren de cercanías), tranvía y autobús urbano, en esta última modalidad existen dos líneas que son mayoritariamente turísticas: la 100 y la 200; pues bien, después de este inciso deciros que decidimos coger el 100 para acercarnos a algunos lugares que aun no habíamos visitado. La primera parada fue Haus der Kulturen der Welt, a la que solo podréis llegar en autobús o caminando ya que s encuentra en medio de Tiergarten (al gran pulmón verde de Berlín, que en nuestra visita se convirtió en el gran pulmón blanco). Como podréis adivinar la Haus der Culturen del Welt (se podría traducir como Casa de la Cultura) es un edificio multiusos en el que podremos encontrar exposiciones, congresos, ponencias e incluso concierto. Estéticamente a muchos de vosotros os recordará a algún edificio de la Ciudad de las la Arte de Valencia, sí, tiene cierto aire, pero este edificio se construyó en 1957.

De nuevo nos subimos al número 100 para bajarnos un par de paradas más adelante: ahora tocaba Siegessäule, más conocida como La Victoria; sin duda la Siegessäule junto a la Puerta de Brandenburgo y el muro, uno de los emblemas de Berlín. La primera vez que recuerdo ver una foto de este obelisco fue cuando vi las primeras imágenes de Love Parade. Inicialmente fue construida frente al Reichstag y más tarde fue trasladada a su ubicación actual durante el dominio nazi. Los 69 metros de columna están colocados como punto inicial para cinco de las grandes avenidas alemanas. En el alto de la columna se encuentra la diosa de la victoria y para llegar hasta ella debemos subir 285 escalones a través de su escalera de caracol. Al los pies de la diosa tendremos una de las mejores vistas de la ciudad que se expande a nuestros pies, veremos el inmenso Tiergarten, la cúpula del Reichstag, la puerta de Brandenburgo, la Torre de Televisión… Merece la pena sentir el aire en la cara a sus 70 metros.